Ciclos vitales y colores magistrales,
Variedad y diversidad a raudales.
Momento mágico donde conviven,
Hojas que caducean con las sempiternas perennes.
Tejos y pinos verdes, en robles y hayas las hallas diferentes, amarillas, rojas, rosas, verdes y moradas; y las ya marrones, hojas, ramas, bayas y frutos, alfombran el suelo, crean húmedo subsuelo y confortan al pasar el mullido caminar.
El crepitar del ruido al pisar, el olor del petricor, embotellado bajo los árboles del bosque cerrado, al abrigo del viento, donde los rayos de sol se cuelan por las rendijas sin apenas tocar tierra.
Es tiempo de cosecha, recolecta de setas en prados y moñigas, charcas y zarzas, arbustos y árboles, y
🎼🎵...agáchate, y vuélvete a agachar! 🎶🎶
Monte de cercanía, ¡quién me mandaría a mí querer ir tan lejos a encontrar la armonía en la vida! ¡Con lo fácil que está siendo trazar el círculo!
Monte Hijedo, Sierra de Juarros y Demanda, montes Obarenses, cañón del Ebro, del Rudrón, montaña Palentina, pantano de Arija, salto del Nervión, hasta viñedos de Riberas y tierras mineras...
Ha llegado el otoño, también a mi corazón,
lo tengo lleno de gozo y paz en lo interior, rebosa abundancia y gracia de ser, las vistas son impresionantes, estar triste es inviable, mirar atrás sin dejar nada y tirar para adelante hasta la llegada.
Entender que todo lo que se cae, termina un ciclo, llevándose lo anterior y dejando el germen de lo nuevo y venidero.